FERRAZ PINCHA EN MADRID (1): GABILONDO, NO
La máxima “Lo que natura no da, Salamanca no presta” (“Quod natura non dat, Salmantica non praestat”) explica desde tiempo inmemorial que hay quien no aprende ni aunque tenga a Aristóteles como maestro...
Aún así, me sigue sorprendiendo la contumacia en el error que demuestran algunos compañeros de militancia que, desde Ferraz, insisten en participar en la elección del candidato a la alcaldía de Madrid, una “ayuda” que cualquier socialista de la capital agradecería si en ocasiones precedentes se hubiera demostrado provechosa, pero que molesta dados los nefastos antecedentes.
Al respecto, ayer se filtró que alguien en la dirección federal había pensado en que el próximo candidato a la alcaldía de Madrid pudiera ser el actual ministro de Educación, Ángel Gabilondo, quien, haciendo gala de cordura, se desmarcó por dos veces de tan errónea jugada:
–Sr. Gabilondo, ¿candidato a la alcaldía de Madrid?
–Tengo la satisfacción de haber asumido recientemente el Ministerio de Educación. Es a lo que me dedico y lo que me ocupa. Es mi verdadero compromiso con el presidente del Gobierno, con el Gobierno, con el proyecto y con los ciudadanos. Cualquier otra posibilidad o debate no sería en este momento oportuno por respeto a esta dedicación, a esa responsabilidad, a los socialistas de Madrid y a los ciudadanos.
–Si el PSOE se lo propusiera: ¿aceptaría ser rival de Gallardón en las municipales de 2011?
–No estoy en absoluto en esa hipótesis. Lo único que me preocupa es cumplir mi actual responsabilidad de ministro de Educación. No entiendo en absoluto este lugar como preparación para ninguna otra tarea. Todo mi esfuerzo se concentra en responder a la confianza que el presidente del Gobierno y el Gobierno han puesto en mí para este enorme desafío.
Dicho lo cual, es oportuno resaltar el desconocimiento que se demuestra, quizás derivado de la añoranza de los tiempos de Tierno o de la pervivencia de cierto provincianismo decimonónico, respecto de la importancia de la alcaldía de Madrid, pues extraña que gente a quien se presupone informada conceda “a la capital” una importancia que no tiene por, al menos, tres motivos:
a) el escaso peso político de las alcaldías en nuestra estructura administrativa –incluyendo Madrid, donde antes de Gallardón, peligroso por sí mismo y no por ser alcalde, pasaron sin pena ni gloria, aunque con mayorías de derechas, Álvarez del Manzano y Rodríguez Sahagún–
b) la escasa repercusión en la vida cotidiana de las decisiones tomadas por los equipos de Gobierno de las grandes ciudades –distinto es si hablamos de los pequeños municipios o pueblos–, al contrario de lo que sucede con los autonómicos
c) el cada vez menor peso demográfico de la capital respecto del conjunto de la Comunidad de Madrid
El último punto es básico para entender por qué LO IMPORTANTE PARA EL PSOE NO DEBE SER YA LA CAPITAL, SINO LA REGIÓN: allá por 1979, cuando el acceso del viejo profesor a la alcaldía, la capital tenía un censo electoral de 2.400.009 electores, mientras en el conjunto de la Comunidad había 3.177.732; ya en 1987, cuando la pérdida de la mayoría de izquierdas –con Juan Barranco como cabeza de lista y al frente del Ayuntamiento, tras la muerte de Tierno en 1986–, el censo electoral capitalino era de 2.376.010 potenciales votantes, mientras el de la región era de 3.526.880; y en las últimas elecciones de 2007, el municipio contaba con 2.404.607 electores por los 4.497.447 de la Comunidad.
Es decir, que mientras Madrid capital mantiene su población desde hace 30 años (los límites geográficos le impide crecer más), el resto de la Comunidad aumenta la suya, de tal modo que en 1979 el 75% de los electores de la región vivía en Madrid capital, porcentaje que en 1987 había descendido hasta el 67% y en 2007 fue del 53%, lo cual hace suponer que en 2011 bajará del 50%, viviendo por primera vez más madrileños fuera de la capital que en la misma.
En resumen, que si alguien en la dirección federal del PSOE cree oportuno jugar al baile de candidatos en Madrid, le convendría intentarlo con quien pueda enfrentarse a Esperanza Aguirre con el Gobierno regional en juego, pues además es la opción que mejor encaja en nuestras tentativas de victoria dada la idiosincrasia del electorado.
Porque otro punto –que en otro post desarrollaré– deberían asumir quienes dedican con poco éxito parte de su tiempo a analizar comportamientos electorales en Madrid: el día en que los socialistas volvamos a ganar las elecciones en la capital, día que por supuesto llegará aunque no en 2011, en la Comunidad tendremos mayoría absoluta...
POSDATA: Como el asunto de las candidaturas madrileñas puede dar mucho juego, inauguro hoy sendas secciones dedicadas a tal efecto, tituladas Comunidad 2011 y Ayuntamiento 2011, respectivamente.
5 comentarios
javierM -
"La ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, es otra posible opción"...
Gensanta...que buda nos pille confesados.
Franesco -
¿Las decisiones tomadas desde arriba, vía CEF o CER, sin mejor criterio político que el que puedan tener otros militantes? Las apoyaría, si se hubiesen demostrado favorables... Pero es que se han demostrado erróneas y sólo quien no quiera dar su brazo a torcer puede apoyar soluciones que están condenadas de antemano al fracaso.
Saludos.
Socialistas por Madrid -
suponemos que se refieren a que la CER y la CEF escogerán al candidato por su cuenta y lo revestirán de eolección por aclamación popular.
Hay concejales muy válidos que llevan más de un mandato y que podrían enfrentarse a cualquier candidato del PP.
lo que no puede ser es pretendder ganar con un mirlo blanco caido del cielo.
Si David Lucas, Oscar Iglesias, Pedro Sanchez, Alejandro Inurrieta o Atonio Carmona van a ser candidatos (por decir algunos de los que se han escuchado), lo primero que deben hacer es trabajar por ello a nivel interno, decir "Si, yo quiero ser el candiodato. Tengo ilusión" y luego, muy posiblemente estar 4 u 8 años dirigiendo el grupo en la oposición.
Franesco -
Y como POTENTES para Madrid no significa que tengan que ser conocidos o reconocidos en Burgos, Sevilla o Alicante (me hace gracia lo de querer presentar "ministros", como si a los madrileños nos impactase ver ministros, que comen cada mañana en nuestras cafeterías y bares...), el PSM debe decidir de forma autónoma, diga lo que diga Ferraz, porque nosotros somos los que al final pagamos el pato de las derrotas... Porque, por si a alguien no le ha quedado claro, los socialistas madrileños sabemos perder solos.
Juan Julián -
1. No se puede ganar la Comunidad si sólo obtenemos resultados positivos en los tres o cuatro distritos de la capital cuyo nombre empieza por "V" (y con resultados cada vez más justitos) mientras que el PP obtiene más del 60% en distritos más poblados. La diferencia en ese 50% que vive fuera de la capital debería ser enorme y conseguir muchas alcaldías de pueblos, para compensar la paliza que recibimos en la capital (y estamos muy lejos de conseguirlo)
2. Las candidaturas madrileñas no pueden dejarse en blanco hasta 8 meses antes de las elecciones, salvo que se dé por hecho que tenemos candidatos y que son los que figuran como "portavoces". Y es que no es lo mismo presentarse como portavoz municipal que como candidato oficial a Alcalde. De hecho creo que ese es un gran error de nuestro planteamiento de las primarias en los sitios en los que tenemos intención de ganar: dejar demasiado tiempo la iniciativa al PP, que luego, en grandes ciudades, no deja margen.