APOCALÍPTICOS E INTEGRADOS
A la victoria de Alfredo Pérez Rubalcaba en el 38 Congreso del PSOE le ha seguido un estéril debate acerca de si la Ejecutiva que le acompaña –aprobada por el 80% del plenario y por lo tanto legitimada para fijar la dirección política del partido– es o no “integradora”, un concepto en boga debido a que en los últimos tiempos algunos perdedores en elecciones internas lo habían utilizado para exigir una representación acorde al resultado obtenido.
Es lo que sucedió en el PSM tras las Primarias que enfrentaron a Tomás Gómez y a Trinidad Jiménez: quienes apoyaron a la candidata derrotada han dado la matraca durante año y medio con la tesis (nociva para la estabilidad de cualquier proyecto político) de que tenían “derecho al 48%” de los puestos en los Comités Electorales, en las listas, en la dirección del partido, etc.
Ahora, ese falaz argumento debería quedar desterrado al ser el propio Rubalcaba, a quien apoyaba el mismo sector que le exigía integración a Tomás Gómez, el que se ha dejado de juegos florales y ha actuado con el método que él denominada “unidad” y reflejan en sus análisis los diarios más alineados a la izquierda:
El País: “Nada que negociar sobre su equipo, los componentes de la comisión permanente”.
Público: “¿Negociación? El secretario general no negocia, designa a su equipo”.
Diario Progresista: “A la integración de las demás sensibilidades, "ni está ni se la espera", pese a las promesas de rigor”.
Nótese que he escrito “debería quedar desterrado” en condicional, porque creo que no será así, dado que en la información que hoy publica El País dichos “sectores más críticos con Gómez” no parecen haber captado el mensaje y afirman: “Es lo que pasa cuando te alineas con quienes no integran. El actual secretario general del PSM tiene mucha tendencia a vivir en el conflicto interno permanentemente”.
En efecto, sigue el raca-raca…
Así las cosas, me permitiré recomendarle al compañero secretario general del PSM que se fije en cómo se ha empleado Rubalcaba en el 38 Congreso del PSOE y haga lo propio en el 12º del PSM-PSOE, que se celebrará los días 2, 3 y 4 de marzo y para el que Tomás Gómez ha anunciado hoy mismo que se presentará a la reelección: trabajar duro para intentar ganar de nuevo la secretaría general, aunque sea al sprint y con un 51% a 49%.
Ello debería implicar que inmediatamente después de renovar su mandato designe una Ejecutiva Regional donde estén presentes quienes le hayan apoyado sin fisuras y que conceda seis o siete puestos para dotar de representación a las agrupaciones correspondientes a municipios que, por su peso demográfico, convenga que formen parte de la dirección, casos de Villalba, Alcobendas, Getafe, Fuenlabrada y alguna más.
Los demás derrotados (incluido quien encabece la lista alternativa, claro), a acatar el resultado y a ponerse a disposición del vencedor pese a no integrar la CER, sin que ello implique tener que actuar conforme al ideario de otro de los más destacados apoyos de Rubalcaba, el sin par Pepe Bono: “Los que han perdido tienen que someterse”.
No es eso, no es eso…
POSDATA: “Apocalípticos e integrados: Comunicación de Masas y Teoría de la Cultura de Masas” es una magnífica obra de juventud de Umberto Eco que tuve la oportunidad de leer en 4º de Periodismo y que os recomiendo.
2 comentarios
Olga Barrios -
Nicolás -