(IN)DISCIPLINA Y CAJAMADRID
Las últimas votaciones en el seno de Cajamadrid, en las que dos consejeros propuestos en su momento por el Partido Socialista de Madrid se han alineado en contra de la supuesta intención de voto de los actuales dirigentes socialistas madrileños, van a seguir siendo noticia, ya que el partido en su ámbito federal ha pedido explicaciones a los dos militantes, Antonio Romero y Francisco Pérez, a fin de conocer el sentido de sus votos y los porqués de los mismos.
Al respecto, Tomás Gómez, ha reclamado de forma oficial, ante el Comité Regional madrileño, una respuesta contundente y el diario Público habla de posible expulsión, aunque el secretario general madrileño reconoce que no existe mandato de voto, porque no puede existir, y ello limita la capacidad de respuesta —expulsar a dos militantes por algo que no es contrario a las normas internas y además es su obligación legal supondría un riesgo para el dirigente que adoptase tal decisión, porque se le podrían exigir después responsabilidades, incluso penales—.
En todo caso, el mero hecho de que esos dos militantes hayan votado como lo han hecho merece una explicación. Pero no sólo por su parte...
Porque no hablamos de dos militantes cualquiera: tanto Antonio Romero como Francisco Pérez han sido —y muy recientemente— secretarios de Organización del PSM. Es decir, fueron los máximos responsables del “aparato” del partido en Madrid, el primero con Rafael Simancas como secretario general durante su primer mandato (2000-2004), tras el cual ocupó la vicesecretaria general, y el segundo, durante poco más de un año (2007-2008), ya con Tomás Gómez.
Por ello, se me ocurren algunas preguntas:
¿Cómo se puede entender que quienes saben lo que supone la disciplina de partido hagan caso omiso a las recomendaciones —no órdenes— de quienes ahora rigen la organización?
¿Acaso los dos compañeros citados nunca supieron lo que era la disciplina de partido y a pesar de ello se les nombró para establecerla y representarla?
¿Quienes propusieron en los Congresos los nombres de dichos compañeros para ser secretarios de Organización, es decir, el anterior secretario general y el actual, nunca sospecharon que se podía esperar algo parecido de unos militantes a quienes encargaban que nos mandasen a los demás?
¿Tanto han cambiado Romero y Pérez, o es que ya eran así?
¿Hubiese sido necesario que los representantes socialistas en Cajamadrid hubieran pasado por Ferraz antes de las votaciones? ¿Lo hicieron?
¿Han existido reuniones en Miguel Fleta en las que se haya informado sobre las intenciones del PSM en torno a Cajamadrid y a pesar de ello los dos compañeros han hecho lo que les ha venido en gana?
¿No han existido esas reuniones, porque no se consideraba necesario o porque los dirigentes anteriores y actuales apenas se hablan —con lo que de irresponsabilidad supondría por parte de unos y otros—, y ahora alguno se lleva las manos a la cabeza?
Quienes sólo somos militantes de base y aceptamos lo que se nos dice, incluso cuando no nos gusta —que suele ser las más de las veces, sobre todo en Madrid—, podemos reclamar de quienes tienen y han tenido responsabilidades que den ejemplo y se comporten del mismo modo que se nos exige a nosotros: con disciplina.
5 comentarios
Franesco -
CHARLIE: No lo dudes, amigo. Todo parte de aquella misma elección.
SOCIALISTAS POR MADRID: No podemos dar por hecho que alguien en el PSM haya decidido apoyar la privatización de Cajamadrid. Si fuese así, estaría cavando su propia tumba política, porque además la dirección de esa Cajamadrid privada no sería afecta a nadie del PSM, que nadie se equivoque. Tampoco las privatizadas ENDESA o TELEFÓNICA nos han dado nada, ni nos darán, a los socialistas. En cuanto a las opiniones de nuestro secretario general, es cierto que ha parecido dubitativo, aunque al final ha tomado una decisión. ¿La acertada? ¿Con todos los elementos de juicio? Esperemos que sí y que no haya sido tarde. En todo caso, si al final tuviera que rectificar, que rectifique y ya está. No cambiar para no reconocer un error es siempre peor que hacerlo y asumir las críticas. Para él y para todos.
JÉSSICA: Nadie que ocupe una responsabilidad puede dejar que las cosas se pudran por no querer tratarse con quien le antecedió. Sería un error mayúsculo por su parte. Porque tampoco los militantes de base nos llevamos bien con todos los compañeros, ni siquiera con alguno de nuestros dirigentes, y pese a todo nos hablamos y trabajamos, porque el proyecto colectivo está por encima del personal. ¿O no? Tomás tiene la obligación de hacer de tripas corazón y relacionarse con todos los militantes que no le han apoyado y que por haber ocupado puestos con Rafael Simancas están en las instituciones. No sólo porque eso nos beneficia a todos, sino porque también le beneficiará a él: son sus únicos posibles aliados.
Jéssica -
Socialistas_X_Madrid -
¿Quién toma la decisión -o indecisión- de apoyar a Beteta en la privatización de CajaMadrid?
¿Tenía más razón Tomás antes que se alineaba con el PP o ahora con la UGT y CCOO -con los que votó Paco Pérez-?
Esto pasa por no tener claras las cosas...
Gracias Franesco por tu blog. Es interesante.
charlie, o terror dos mares -
LaEspeForPresident !!!!
A MELHOR DO MUNDO.
Elvira -
Hoy tienes que aceptar algo, que cambia rotundamente cuando el Secretario General es otro.
Lo siento, no me gusta este tipo de disciplina "haz lo que yo diga pero no hagas lo que yo haga", me suena a otros tiempos.
Se feliz